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El quehacer docente : hablando del estrés y sus implicaciones psicológicas

Los docentes enfrentan múltiples fuentes de estrés en su trabajo diario, que van desde la carga de trabajo excesiva, la presión para alcanzar resultados académicos, hasta la falta de recursos, los salarios bajos y la falta de apoyo adecuados. Lo que desencadena, como lo señala Esteve: “Desequilibrios personales y emocionales; frustración a la que llegan muchos y muchas docentes, que ven como sus esfuerzos y su trabajo no se transforman en la consecución de unos objetivos concretos y palpables .

Esteve, J. M. (1994). El malestar docente.

Consecuencias psicológicas

  • Agotamiento y fatiga:  La falta de tiempo para descansar y recuperarse adecuadamente puede provocar fatiga crónica, lo que afecta su capacidad para enfrentar los desafíos diarios en el aula.
  • Ansiedad y depresión: Las demandas constantes, la presión para alcanzar metas y la falta de control sobre su entorno pueden desencadenar síntomas de ansiedad y depresión en los educadores.
  • Síndrome de Burnout: El síndrome de Burnout es una forma extrema de agotamiento relacionado con el trabajo. Los docentes son especialmente susceptibles a este síndrome debido a las altas demandas emocionales y cognitivas de su trabajo. El Burnout se caracteriza por el agotamiento emocional, la despersonalización y la disminución de la realización personal.
  • Problemas de salud física: Los docentes, pueden experimentar síntomas como dolores de cabeza, trastornos del sueño, problemas gastrointestinales y supresión del sistema inmunológico. Estos problemas de salud pueden afectar aún más su capacidad para desempeñarse eficazmente en el aula.

Medidas para tratarlo

Algunas estrategias que pueden ayudar a combatir el estrés docente y promover un ambiente de trabajo saludable y productivo son:

1.Reconocer que factores lo desencadenan:

Se debe reconocer los factores que contribuyen al estrés , como la carga de trabajo, la falta de recursos, la presión por los resultados académicos y la falta de apoyo administrativo o de los compañeros de trabajo.

2.Fomentando la autoconciencia y la autorreflexión:

La importancia de que los docentes sean capaces de reconocer  sus propias necesidades y limitaciones. Por medio de herramientas y técnicas para fomentar la auto-conciencia, dentro de las cuales e incluye técnicas de meditación y auto-control.

3.Promoviendo una cultura de apoyo en las instituciones educativas:

Estrategias para fomentar la colaboración entre los docentes, como la creación de grupos de apoyo y espacios de diálogo.Por medio de canales de comunicación, en el cual tanto docentes como administradores, sean abiertos y sinceros.

4.Fomentando el equilibrio entre el trabajo y la vida personal:

Los docentes, deben empezar a darle la importancia que se merece a establecer límites y priorizar el bienestar personal. Deben optar por estrategias para mejorar la gestión del tiempo y evitar el agotamiento, como establecer rutinas de trabajo, descanso y vida social, así como también de delegar tareas cuando sea posible.

5.Acceso a recursos de apoyo:

La importancia de proporcionar a los educadores acceso a recursos y programas de apoyo, como servicios de asesoramiento y terapia.  Con la promoción de políticas y programas institucionales que apoyen el bienestar de los educadores.

Lo anterior, no solo beneficiarán los educadores, sino también los estudiantes y el sistema educativo en su conjunto. Al abordar el estrés docente y proporcionar el apoyo adecuado, se puede crear un entorno de trabajo saludable que promueva la salud mental y el bienestar de los educadores y su entorno académico .