Asociado oficial de pymecol

Cómo enseñar a tu niño o niña a comer de todo

El proceso que el niño o niña vive al comer, le ayudará a desarrollar tejidos, funciones neuronales y la energía necesaria para suplir las demandas del día a día. Resulta de vital importancia que sea un momento que se disfrute y no se convierta en el afán que muchos papás tienen que el pequeño coma de todo, incluyendo las temidas verduras.

Black, hace una análisis y lectura acerca de este proceso de la alimentación de los niños y niñas, desde la perspectiva cultural: 

“El hambre y la saciedad de los niños son guiadas por los procesos internos de regulación e influenciadas por los cuidadores y el contexto de la alimentación (13). ¿Qué?, ¿cuándo? y ¿cómo? comen los niños, en gran medida son establecidos por un amplio rango de determinantes y procesos familiares que se extienden desde las creencias y patrones culturales sobre la comida para los niños; a la disponibilidad y accesibilidad de los alimentos; al tiempo necesario para preparar y servir la comida; a las preferencias del gusto y contexto de los cuidadores y, finalmente, a las percepciones y preocupaciones con respecto al tamaño de los niños, su salud, preferencias, y destrezas de alimentación (14)”.

   Black, Maureen M, & Creed-Kanashiro, Hilary M. (2012). How to feed children?: Healthy eating behaviors starting at childhood. Revista Peruana de Medicina Experimental y Salud Publica, 29(3), 373-378. Recuperado en 24 de febrero de 2022, de http://www.scielo.org.pe/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1726-46342012000300013&lng=es&tlng=en

El contexto, la actitud y la imitación como factores determinantes

Para que la hora de la comida de verdad sea un momento de deleite y placer para los sentidos, se puede empezar mezclando proteína con pequeñas cantidades de verdura( un brócoli con pollo cocido), para que el niño descubra su textura, identifique su sabor. 

Hay que destacar que Mesa, fórmula que “La estructuración de los hábitos alimentarios en la niñez, no responden a un simple acto reflejo, estos comienzan a tener significación a través de una estructura integrada de necesidades, ideas, recuerdos y afectos. La respuesta que da el niño, también implica sus necesidades, sus ideas, sus recuerdos y sus afectos”

Mesa, S. L. R. (2007). Percepciones frente a la alimentación y nutrición del escolar. Perspectivas en nutrición humana, 9(1), 23-35.

Compartir un tiempo de la comida, ayuda a fortalecer aprendizajes, a través de la imitación de patrones de conducta sobre la mesa. El niño o niña siente curiosidad por cómo comen sus padres . Analizaran sus conductas y aprenderán de la información del entorno, de qué forma se debe comer los alimentos, como se debe sentar a la mesa, que utensilios sirven para alimentarse.

Lo que le evocará en el pequeño sensaciones, de agrado o desagrado. Con ciertos alimentos podrá tener recuerdos creando estructuras que le servirán en su formación en el futuro, lo cual le servirá para aprender experiencias y sensaciones que le aportaran en su desarrollo cognitivo, motriz y afectivo.